Hoy, los artistas jóvenes que se están haciendo a sí mismos, componen y producen ellos solos o con amigos desde estudios caseros intentando hacerse un nombre tanto en Spotify o Youtube como en las salas de conciertos. Uno de ellos es Bon Calso. Jorge González Muñoz empezó con este proyecto en 2018, nueve años después de iniciarse con la música. Desde entonces, el artista, ha sacado trabajos como: Feelings Matter (2019), que le llevaron a hacer su primer concierto y sold out en la Sala Goya Social Club de Madrid; Outta my head (2022) y su último álbum: Love Me Not.

El artista tiene una de las carreras más prometedoras de los últimos años. Busca su propio hueco en la llamada escena urbana española nutriéndose de los estilos más crecientes que propone el pop internacional, como el trap o los ritmos caribeños. Apostando por un estilo propio que ha ayudado a llevar su música mucho más lejos.

El pasado 4 de Noviembre este joven artista llenaba la Sala Cool de Madrid. Aparecio con «El Último Trago» con una energía que el público igualó enseguida. El público constituía un coro que no se saltaba ni una palabra de las canciones. Una masa de personas creando una marea. Con temas como Lo dejo to, Ojala, Te Robé, Que Te Vaya Bonito, Sin Llevar Na o Por la Noche; o canciones de su anterior álbum como Outta My Head, K.I.N.G o Pornstar. Decidió poner a prueba a su público madrileño apelando a “los fans reales” que se supieran las canciones más antiguas como Estrellas.

También conto con otros artistas como Nevo Angel para Te hubiera sido mejor, Aron con Me quite de ti y Papi Trujillo en No puedo dormir.

Bon Calso se mostró muy cercano con sus fans durante toda su actuación, cogiendo varios móviles para grabarse a sí mismo, posteando un BeReal o lanzadose al público. La conexión es mágica entre público y artista. Sus letras representan de la mejor manera el sentir de muchos de los jóvenes de hoy.